Ingredientes:
500 g de harina de fuerza
250 ml de agua tibia
20 cc de aceite de oliva
25 g de levadura fresca de panadería
1 cucharadita de sal
250 ml de agua tibia
20 cc de aceite de oliva
25 g de levadura fresca de panadería
1 cucharadita de sal
Preparación:
Deshacemos la levadura en el agua tibia, no tiene que estar muy caliente, solo un poco templada.
Formamos un volcán con la harina y ponemos los demás ingredientes al centro, vamos integrándolos con la harina poquito a poco hasta formar una bola suave y blanda.
La amasamos bien durante 15 minutos y la dejamos reposar tapada, hasta que doble su tamaño
Ponemos a precalentar el horno a 240º y engrasamos la placa con un poquito de aceite de oliva.
La dividimos en porciones de unos 60 o 70 g , les damos forma de bola y las aplanamos formando un circulo sobre la mesa enharinada y las vamos dejando en una placa de horno aceitada.
Las horneamos enseguida durante unos 8 minutos hasta que estén hinchadas, las sacamos y las metemos en una bolsa o recipiente para que queden blandas.
Cuando vayamos a usarlas solo tenemos que calentarlas un poco en el horno o tostadora y abrirlas para rellenarlas de lo que queramos.
Podemos tenerlas congeladas y así listas en cualquier momento para una cena o comida rápida.
Deshacemos la levadura en el agua tibia, no tiene que estar muy caliente, solo un poco templada.
Formamos un volcán con la harina y ponemos los demás ingredientes al centro, vamos integrándolos con la harina poquito a poco hasta formar una bola suave y blanda.
La amasamos bien durante 15 minutos y la dejamos reposar tapada, hasta que doble su tamaño
Ponemos a precalentar el horno a 240º y engrasamos la placa con un poquito de aceite de oliva.
La dividimos en porciones de unos 60 o 70 g , les damos forma de bola y las aplanamos formando un circulo sobre la mesa enharinada y las vamos dejando en una placa de horno aceitada.
Las horneamos enseguida durante unos 8 minutos hasta que estén hinchadas, las sacamos y las metemos en una bolsa o recipiente para que queden blandas.
Cuando vayamos a usarlas solo tenemos que calentarlas un poco en el horno o tostadora y abrirlas para rellenarlas de lo que queramos.
Podemos tenerlas congeladas y así listas en cualquier momento para una cena o comida rápida.
Comentarios
Muchos besiños y buen fin de semana
Espero que nos leamos a menudo. El pastel de carne y patatas me ha encantado, y este pan de pita también, lo dejo en pendientes.
Un besito.
Besitos!